Las 37 familias que viven en el asentamiento irregular San Antonio Xluch III hicieron público su enojo hacia Renán Barrera, pues durante su campaña para la alcaldía de Mérida les prometió que si llegaba al poder, iba a apoyarles en la regularización de sus hogares, sin que esto a la fecha se haya realizado.
Los afectados, dicen, nunca más recibieron la visita ni mucho menos la ayuda del político panista, a quien se le hizo fácil hacer promesas vacías a estas personas que viven en la pobreza extrema en casas de cartón, madera o algún material reciclable y que por ende, carecen de los servicios más básicos.
Entre los problemas que enfrentan, está el obtener agua de un pozo y la electricidad, de una extensión que comparten, sin que estos recursos sean suficientes para todas las familias, por lo que es complicado el día a día, y más en esta época en que el clima empieza a estar lluvioso o frío.
La vecina Yuliana Gómez dio a conocer que desde hace un año solicitaron la construcción de calles al Ayuntamiento, pero al momento han sido ignorados, e incluso menciona que ya perdieron la esperanza, pues “Renán ya hasta está en otra campaña, cuando ni siquiera ha cumplido las promesas de la anterior”.
Por ello, los vecinos están unidos y alzando la voz para pedir que les cumplan lo que les prometieron, pues incluso una de las familias tiene a un miembro enfermo de cáncer y además del costo de su tratamiento, no tienen las condiciones salubres adecuadas para cuidarlo.
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